Sabemos que el glaseado puede ser una tarea difícil, y por eso estamos aquí para ti, para entregarte los mejores consejos y así puedas enfrentar esta preparación. Y no importa, si lo estás intentado por primera vez o ya llevas varios intentos, las recomendaciones que te dejaremos a continuación no fallarán.
Sabemos que el glaseado puede ser una tarea difícil, y por eso estamos aquí para ti, para entregarte los mejores consejos y así puedas enfrentar esta preparación. Y no importa, si lo estás intentado por primera vez o ya llevas varios intentos, las recomendaciones que te dejaremos a continuación no fallarán.
El ingrediente que no puede faltar es el azúcar glass o también como azúcar flor, en caso de que no encuentres en tu despensa, puedes triturar azúcar normal en una batidora y luego pasarla por un colador de malla fina.
Te recomendamos que los huevos con los que vas a preparar el glaseado se encuentren en temperatura ambiente. Y si olvidaste sacarlos del refrigerador a tiempo, puedes calentar los huevos bajo el grifo con agua caliente por 1 minuto.
Un paso para lograr el glaseado tradicional perfecto es coger un huevo y separar la clara de la yema, ya que esta última será la que ocuparás para tu glaseado.
Recuerda siempre tamizar el azúcar glass y si tienes dudas, entonces vuelve a tamizarla ¡no pasa nada! La clara de los huevos y el azúcar los debes batir energéticamente hasta lograr una mezcla homogénea. Si quieres descubrir que todo se encuentre en orden, entonces levanta la varilla con un poco de consistencia y si demora en caer, entonces vas bien.
Te darás cuenta de que la mezcla esta lista porque comenzará el proceso de cristalización del azúcar, por lo que el glaseado se ira solidificando. Así que no esperes más tiempo y pasa el glaseado a una manga pastelera. No debes tardas más de 10 minutos en hacerlo, ya que la consistencia podría comenzar a debilitarse.
Solo añade 2-3 gotas de agua para aligerarlo, sin embargo ten en cuenta que deben ser gotas, nada de cucharadas.
¿es posible? Pues claro, incluso puedes colorear el glaseado de diferentes colores, lo único que debes hacer es separar la mezcla en diferentes cuencos y añadir algunas gotas de colorante ¡Inténtalo!
Puede ocurrir el caso de que ocupaste todos los huevos para la mezcla de tus galletas y ya no quedan para elaborar el glaseado, no entres en pánico, también puedes hacerlo sin huevos. Lo único que debes hacer es mezclar el azúcar con dos cucharadas de agua caliente.
¡Queremos verte en acción! Por eso, a continuación te dejamos algunas de nuestras más deliciosas recetas de galletas, tenemos con sabor a jengibre o de coco. Por último, no olvides añadir glaseado en ellas y seguir todas nuestras recomendaciones para lograr un resultado perfecto.